19.3.10

Vino y menta




Cerro los ojos.
Quiza asi se podria borrar todo lo acontecido los ultimos años de su vida....

No, borrarlo significa perder en la memoria sus besos, su piel, sus labios...

Perder las noches en las que fueron un solo ser, unido por la carne que ardía entre las llamas de una pasión casi mortal....


Conquistando las sombras con los roncos y suaves gemidos agonizantes del placer alcanzando el paraíso de los pecadores...


Mordisqueando sin piedad la esponjosa humedad de una almohada...


Matando con las uñas un millón de células de su espalda caliente y sudorosa...


Mezclando salivas y lenguas en un ataque sin freno de sus besos agridulces con sabor a vino tinto y menta...



Abrió los ojos.


Todo seguía igual.

15.3.10

Mujer al espejo




Hoy me corte el cabello, necesitaba urgente un cambio, para que el espejo me dijera alguna palabra bonita... Ser diferente, al menos por fuera, porque por dentro sigo igual... La misma soñadora impulsiva y triste de tus recuerdos... Esa mujer que todavía guarda la esperanza de amor eterno y de vidas compartidas, esa que espera encontrar en tu cabello el escondite perfecto a sus pesadillas. La emprendedora incansable, la niña enojona, la dulce amante de tu cama, la hambrienta mujer que muerde tu boca en cada beso, esa sigue igual, aquí, dentro, tratando de escapar de este cuento interminable de extrañarte, de pensarte, de odiarte... De amarte en este profundo silencio...

Esa que por las noches cierra los ojos, entre sudor y gemidos imagina el encuentro casi perfecto de pieles, lenguas y gritos dormidos....
Trazando lineas interminables con dedos temblorosos...

Si, la imagen del espejo es diferente, sonriente....
Pero por dentro, soy la misma mujer, con el corazón herido.

9.3.10

La silla


Una silla a mitad de la habitación.
Habitación decorada con un toque de amor, cuadros de ilusión colgados en la pared, fotos de planes futuros por doquier, un brote de aire fresco y limpio se respiraba dentro.
Sonreí.
No podía existir nada mejor. A lo lejos se escuchaba el rugir del cielo, anunciaba la radio una tormenta; pero el sol aun pintaba de luz la habitación...
Un parpadeo, todo se lleno de penumbras, la luz brillante y blanca de los relámpagos iluminaba las paredes ahora vacías, cuando después del mortal silencio del relámpago, llegaba con fuerza el ensordecedor estruendo del trueno.
Miedo, tuve miedo.
A mi lado, en otra silla, se encontraba el, lo mire a los ojos, tome su mano, y en silencio me dijo: "tranquila, la tormenta pasara dentro de poco".
Otro parpadeo, y sentí frío.
Su mano ya no me sujetaba.
Al mirar la habitación comprendi que no era la misma, no había cuadros, ni fotos, ni el toque de amor, solamente podía ver ventanas, cerradas, oscuras, en las que se dibujaban siluetas de personas, resultando sus rostros borrosos un tanto familiares.
Me miraban fijamente.
Otro relámpago, un trueno, y las siluetas tomaron forma, mostrándome de lleno sus rostros de ojos apagados y furiosos, con su brazo derecho levantado, señalándome con el dedo índice, todos y cada uno de ellos.
Mire a mi lado y me encontraba sola, rodeada de esa gente que comenzaba a murmurar cosas que no podía comprender...
Seguían señalándome, murmurando, palabras hirientes, con la intención de lastimar...acercándose poco a poco hacia mi, mostrándome sus perfectos dientes afilados, sacando su lengua venenosa...acusándome de un millón de pecados...
Quise gritar, mas de mi boca no salio sonido alguno; solo podía sostenerles la mirada, alejándome a paso lento de sus dedos...
Un jardín.
Se escucho el sonido fuerte de una puerta al cerrarse justo en mi nariz.
Los murmullos se fueron alejando...
Relámpago, trueno!
Comenzo a llover pétalos de flores de todos los colores...al golpear la lluvia multicolor mi cuerpo, podía sentir los pétalos como si fueran piedras, provocandome heridas ahí donde tocaran; con cada golpe escuchaba sus murmullos de insultos ir y venir, mientras mi piel sangraba...
Los escuche hasta perder el sentido; ahí, en ese jardín desconocido, tirada, ensangrentada, perdida...morí.

Me despertó el un canto angelical.
Abrí los ojos, y la luz intensa de su mirada azul me llego al alma, su mano pequeña y caliente sostenía mi mano.
Al ver mis ojos abiertos me envolvió en su abrazo tierno, cálido...invitándome en un susurro a mirar al rededor...
Una habitación brillante, con todos los colores del mar infinito, mezclados con su piel blanca y brillante de niño...había llegado a casa, al fin todo se sentía vivo, justo aquí, donde todo es completamente mio.

6.3.10

Angel de lujuria....


Día de brujas.
Una de esas noches en las que terminas en el lugar que menos esperabas, en el lugar al que decías jamas irías...pero era el único lugar al que en ese momento podías entrar.
Mesa llena, música buena, pista de baile, y mucha cerveza...tu amiga peleando con el mesero por un vaso...en eso volteas, detienes tu mirada en su rostro y te pierdes.....

Esa fue la primera vez que lo vi, la primera vez que cruzamos palabra. Puedo decir que su rostro tan parecido al mio me cautivo, y su sonrisa, mortal!!!!!!
Después de esa noche, regrese al mismo lugar cada fin de semana, con la esperanza de ver su rostro blanco y pecoso, tratando de averiguar su nombre...
Pasaron tres fines de semana, hasta que lo volví a ver...atravesó todo el lugar solo para ir a encender mi cigarro, y sonrió...

Pasaron cerca de 6 meses de coqueteos, miradas, pequeñas charlas, un hasta pronto....y cada día que pasaba, lo deseaba mas...

Sentada en el escritorio de la oficina, miraba al vacío cuando sonó el teléfono, sin muchas ganas atendí la llamada...una voz masculina preguntaba por mi, era el...
Salimos esa noche, cena a las 2 de la mañana, mirador casi al amanecer, primer beso, primera caricia...y un policía...regrese a casa con la sonrisa pintada en el rostro, sonrojada, y frustrada...

Las salidas a cenar se repitieron dos o tres veces, un beso, una caricia, luego a casa....sin el...era una tortura no poderlo tener a mi lado en la cama!

Verano, noche calurosa, un "salimos a cenar hoy", vestido, ropa interior sexy, cabello suelto, zapato algo, esa tenia que ser la noche...
Llego, vestido como para ir a correr!!! mi decepción no pudo ser mas evidente...
Me tomo de la mano, me ayudo a subir al auto, y sin hacer preguntas ni comentarios arranco, directo al hotel mas cercano, no hubo palabras, solo besos, sonrisas, caricias, lengua....
Piel sudorosa, suave, mordida, mis manos atadas por sus manos, mi boca fundida con su boca, mi cuerpo levemente sofocado con el peso de su cuerpo, su sexo unido al mio, movimientos leves y firmes, unión perfecta....el complemento....mi ángel de la lujuria....