Brisa fresca y suave...
Como el ángel de mi guarda, eres mi dulce compañía
En el viejo baúl de mis recuerdos, celosamente escondo amarrados con un listón azul aquellos deliciosos momentos
cuando eramos un solo cuerpo, cuando mis manos y lengua acariciaban sin descanso tu lado derecho...
Partiendo de la oreja hasta llegar a tu cadera...
Candado y llave cierran el baúl, con amor te guardare, mientras busco en el horizonte anaranjado hacia donde volar.
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Soy la primer alma al descubierto ¡¡¡ yea ¡¡¡
ResponderBorrarMmmmm, me ha dejado calido ese poema.
Esos momentos que se extrañan....y necesitan.
ResponderBorrarBesos ABi!
mmmmm... que momentossss....
ResponderBorrarInstantes vivos, que oscilan por siempre....
ResponderBorrarMuchos saludos para ti
Agustín